Modo de preparación
El hígado de cerdo se lava muy a fondo y se limpia de membranas y venas. Se corta en trozos no muy grandes.
Colocar en un bol y verter por encima la leche, el azúcar y el jugo de limón. Dejar reposar así durante 1 hora.
Mientras tanto, saltear el puerro picado en una sartén más profunda. Cuando se ablanda, añadir el hígado marinado y escurrido de la leche. Freír durante unos pocos minutos.
Echar el vino y dejar que el plato hierva a fuego lento hasta que el hígado esté cocido.
Servir con arroz blanco cocido.
El hígado de cerdo frito está hecho.