Modo de preparación
Corta el repollo en hojas y corta la vena dura del medio de cada una. Dependiendo del tamaño de las hojas, puedes cortarlas a la mitad o no. Si no te gusta demasiado ácido, remójalos en agua o en jugo de repollo para evitar que se sequen.
Comienza con el relleno cortando finamente la cebolla. Ralla las zanahorias y ambas verduras, con una pizca de sal, y cocine a fuego moderado en el aceite.
Mientras tanto, lava y corta los champiñones junto con los tallos en trozos relativamente pequeños y añade al resto de verduras junto con la grasa restante. Cocine por otros 5-6 minutos y agregue el puré de tomate, la pimienta negra y un poco más de sal.
Después de que todo esté bien frito y el agua del puré se haya evaporado, echa el arroz, previamente lavado del almidón. Revuelva durante 2 minutos y vierta agua, dos partes del volumen de arroz. Cocina hasta que lo absorba todo, no debe quedar del todo cocido, pero sí ligeramente firme. Agrega la ajedrea y retira del fuego. ¡Agrego más ajedrea, porque da muy bien sabor!
Una vez que el relleno se haya enfriado un poco, haga los rollitos poniendo una cucharada del relleno en la hoja de col, luego enrolle y sella bien.
En el fondo de una olla honda, coloque una capa de las hojas de col restantes. Generalmente siempre hay algunas rotas o que no sirven para rellenar, así como las partes fibrosas recortadas. Encima, coloque el sarmi firmemente uno al lado del otro en tantas capas como lo permita el tamaño/ancho de su olla. Si lo deseas, ponles unas ramitas de ajedrea y cúbrelas con más hojas de col.
Vierta suficiente agua para que sea visible en la superficie, pero no cubra completamente los rollitos. Presiona con un plato pesado y cubre la olla con una tapa. Coloque a fuego medio a bajo durante aproximadamente 1 hora o hasta que las hojas de repollo estén lo suficientemente suaves.
Sirva con crema agria.
Al día siguiente rollitos de col son aún más sabrosos que el día en que se hicieron.
¡Disfrute de su comida!