Modo de preparación
Tamizar la harina en un bol y mezclarla con la levadura seca (no es necesario mezclarla con líquido ni activar previamente). Hacer un hueco y verter el agua ligeramente templada, la clara del huevo (reservar la yema para untar al final), la sal, el azúcar y el vinagre.
Amasar una masa elástica y lisa trabajando con ella durante al menos 15 minutos.
Formar una bola, engrasarla con aceite de oliva y dejar reposar en un lugar cálido durante 1 hora.
Colocar la masa leudada sobre la encimera de la cocina espolvoreada con harina o untada con aceite de oliva y amasar brevemente. Separar una pequeña parte y formar una bola del tamaño de un huevo, el resto, en una bola grande.
Con ayuda de un cuchillo largo, por el lado romo, realizar 4 cortes simétricos longitudinales, o mejor dicho apretones, sin llegar al final y cortando por completo. La idea es distinguir los pétalos de la flor.
Con las manos o con un cuchillo hacemos una distancia de al menos 1 cm entre cada “pétalo”, y en el medio debe quedar un espacio donde colocaremos la bolita. Cuando esté listo, untar nuevamente ligeramente con aceite de oliva, cubrir con un paño limpio y dejar reposar nuevamente durante 30 minutos en un lugar cálido.
Pincelar con la yema batida, espolvorear con sal en escamas y orégano. Adornar con tantas aceitunas como quieras. Solo puse una en el medio.
Hornea el pan a 175 grados con ventilador durante 30-35 minutos o hasta que esté dorado.
Inmediatamente después de sacar del horno, rociar con agua, untar con mantequilla o colocar en trozos sobre el pan para que se derrita solo. Cubrir con un paño húmedo y dejar reposar durante 5-10 minutos.
¡Disfrutar! El panecillo mediterráneo en forma de flor ya está listo.