Modo de preparación
Salsa Napolitana de tomate
Calienta aceite de oliva en una cacerola y agrega los dientes de ajo cortados en rodajas finas. Rehoga un rato, el suficiente para que suelte aroma y quede ligeramente dorado. Agrega los tomates, la zanahoria en trozos, el tomate concentrado, el azúcar, la sal y la pimienta al gusto. Cocine a temperatura moderada hasta que tenga un espesor medio. Retire los trozos de zanahoria, pero guárdelos ya que se agregarán al relleno.
Salsa Boloñesa
Pica la cabeza de cebolla y sofríela en 3 cucharadas de aceite de oliva hasta que esté suave. Agrega la carne picada y desmenúzala con un tenedor, hasta que se convierta en migajas. Agrega los trozos de zanahoria y tritura con un tenedor. Vierta el vino, espere 30 segundos a que se evapore el alcohol, agregue la canela, la sal, la pimienta negra y 150 ml de la salsa preparada. Espolvorea una pizca de orégano, tomillo, añade los clavos y la hoja de laurel.
Añade 100 ml de agua. Tapa la olla y cocine a fuego lento durante aproximadamente 1 hora, hasta que solo quede la grasa y espese por completo. Retira del fuego y añada 100 g de queso rallado.
Bechamel
La bechamel debe quedar más líquida de lo normal.
Fríe cucharadas de harina en el aceite de oliva y la mantequilla durante 30-40 segundos hasta que la harina cambie de color. Agrega lentamente la leche mientras revuelves continuamente.
Una vez que el líquido se ha absorbido por completo, agrega una nueva porción de leche y así sucesivamente hasta terminar la leche. Se obtiene una salsa suave. Agrega nuez moscada rallada, sal y pimienta blanca molida.
A la carne picada se le añaden de 5 a 6 cucharadas de bechamel y se mezcla bien. Esta mezcla la utilizaremos para rellenar los canelones, que no se cocinan previamente, esto último es importante e interesante en esta receta. La razón es que cuando están blanqueados los canelones, entonces es muy difícil rellenarlos, hay que trabajar rápido para que no se peguen, y al mismo tiempo nos podemos quemar los dedos de forma desagradable. Para rellenarlos por comodidad, usé una manga pastelera, pero también puedes usar una cucharadita, aunque es más lento para llenarlos.
En la fuente en la que se hornearán los canelones, vierte 5-6 cucharadas de bechamel en el fondo.
Los canelones rellenos se colocan bien apretados en la fuente y se cubren con el resto de la salsa bechamel, y el resto de la salsa se vierte por encima sin que se esparza. Añade unos 70 ml de agua para ablandar bien la pasta durante el horneado.
Cubrir con papel de aluminio y hornear a 200 grados durante unos 35-40 minutos, retirar el papel de aluminio y espolvorear con el resto del queso rallado. Gratinar hasta que esté dorado. Retirar del horno y espolvorear con albahaca picada.