Modo de preparación
Horno - 180 grados; Bandeja de horno forrada con papel de hornear.
Comenzamos pelando y rallando las manzanas y membrillos. Las ponemos en una cacerola al fuego junto con 4 cdtas de azúcar. Vamos removiendo con una cuchara hasta que el liquido que ha soltado la fruta se evapore. Dejamos espesar un poco y agregamos las nueces y la canela. Mezclamos bien y retiramos del fuego. La mezcla debe quedar espesa, poco humeda. La dejamos enfriar, ya que nos servirá para rellenar las galletas.
Mezclamos el huevo con el azúcar glass, el aceite y el yogur. Agregamos poco a poco la harina tamizada con la levadura. Luego añadimos la mantequilla. Amasamos y formamos una bola. La dejamos reposar durante 15 minutos.
A continuación, dividimos la masa en tres partes que extendemos con el rodillo en forma de círculos. El primer círculo cortamos con un vaso o molde con un diámetro de 10-12 cm. Debemos 5 círculos más pequeños en los cuales ponemos una cucharadita del relleno en el centro. Doblamos sin sellar los bordes y colocamos en la bandeja de horno forrada con papel de hornear.
La segunda parte de la masa extendida se corta en 4 partes que se relenan con la mezcla de fruta y se enrollan. Los estremos de cada rollo se doblan hacia adentro. Una vez listos, colocamos los rollitos en la bandeja.
La tercera parte de la masa la cortamos en 4 cuadraditos. De la misma manera ponemos 1 cucharadita del relleno en el centro de cada cuadradito y doblamos/plegamos (sin sellar los bordes). Colocamos estas galletas en la bandeja.
Los recortes de la masa se pueden volver a extender con el rodillo y formar galletas poniendo del relleno en el centro.
Horneamos a 180 grados durante 20-25 minutos. Dejamos enfriar y espolvoreamos con azúcar glass. Nuestras galletas caseras de membrillo y manzana están listas para el desayuno. ¡A mis niños les encantan muchísimo!
Nota: Estas galletas quedan algo sequitas, muy sabrosas y ricas, con un relleno delicioso - ligeramente acido y dulce. Se pueden hacer de cualquier forma.