Modo de preparación
Pon los mejillones en una olla con agua fría y déjalas en remojo durante una hora. Luego lávalas bien con un cepillo.
Retira los mejillones rotos o agrietados. Transfiéralos a un plato hondo, vierta la cerveza, la sal y la mantequilla. Revuelva.
Una vez que hierva la cerveza, dejar cinco minutos y apagar el fuego.
Sirva los mejillones con cerveza y mantequilla. Son un gran aperitivo para el vino o la cerveza.