Modo de preparación
Cortar el calabacín en lonchas finas. Blanquear los calabacines en agua hirviendo con sal durante 3-4 minutos, luego retirar a un colador y esperar a que se drene el agua.
En un bol, batir el huevo con la leche, una pizca de sal y una pizca de pimienta negra. Coloque un pequeño trozo de mozzarella encima de cada tira de calabacín y cubra con ambos extremos.
Enharinar, pasar por huevo batido y pasar por pan rallado. Forrar una bandeja con papel de horno.
Colocar los calabacines, rociar cada uno con una cuchara de aceite de oliva y hornee a 200 grados en un horno precalentado durante unos 15 minutos o hasta que estén bien dorados.
Servir el calabacín rebozado caliente. Crujientes y muy sabrosos calabacines con mozzarella al horno.
¡Buen provecho!