Modo de preparación
Para preparar este gimbap coreano, primero hacemos la tortilla. Batimos los 2 huevos en un bol, añadimos la zanahoria rallada y las cebollas viejas y frescas picadas muy finas. Sazonamos con sal de Himalaya, 2-3 pizcas de cúrcuma y 3 pizcas de pimienta negra molida. Batimos bien con un tenedor todos los ingredientes para la tortilla.
Calentamos 1-2 cucharadas de aceite de girasol en una sartén grande de cerámica (con recubrimiento antiadherente) y echamos la mezcla de huevo, esparciéndola como una crepe.
Esperamos a que se dore por abajo y luego, por un extremo, empezamos a enrollar un rollo apretado con una espátula o un batidor de silicona. Después de envolver el rollo, lo terminamos de freír en la sartén por todos lados hasta que esté dorado, para que los huevos no queden crudos por dentro.
Sobre una estera de bambú, colocamos una lámina de alga Nori, con la parte lisa hacia abajo. Extendemos uniformemente 1 taza de arroz previamente cocido en olla arrocera (opcionalmente mezclado con un poco de aceite de sésamo y vinagre de arroz).
Es muy importante dejar una tira sin arroz en la parte inferior y superior de la hoja, de unos 1.5-2 cm de ancho, para luego enrollar y pegar el rollo de gimbap, y extender el arroz por ambos lados hasta el final de la hoja. Sobre él, en el medio, colocamos el rollo de huevo, para rellenar.
Usando la estera de bambú, comenzamos a enrollar el rollo de gimbap, asegurándonos de que perfecto, recto y apretado.
Cortamos el rollo con un cuchillo húmedo afilado, que después de cada pieza cortada lavamos, secamos y volvemos a humedecer ligeramente. Se obtienen 10 rollitos de sushi.
Acomodamos los bocados asiáticos en un plato de cerámica y servimos el increíblemente delicioso y recién preparado gimbap coreano con tortilla de huevo y verduras para el almuerzo o un picnic familiar.
¡Maravillosamente delicioso!