Modo de preparación
Tamizar la harina en un bol, hacer un hueco y espolvorear la sal y la levadura seca por los bordes.
Separar la yema de la clara del huevo y calentar ligeramente el agua mezclada con las cucharadas de yogur. Verter todo esto (excepto la yema, que reservaremos para el final) en el seco en la harina, junto con la mayor parte de la manteca, reservando el resto para untar sobre la masa.
Empezar a mezclar con una cuchara. Si la masa parece delgada, agregue un poco de harina, pero no exagere, la masa debe ser bastante delgada. Después de haber mezclado bien todos los ingredientes, cepille ligeramente la parte superior con la grasa restante y cubra con film transparente. Deje leudar en un lugar cálido durante una hora.
La masa estará muy espumosa y pegajosa, así que rasparla con una espátula directamente en la fuente de horno (aceitada y enharinada o forrada con papel de horno).
Recomiendo que sea de paredes altas y tamaño 26/13 (similar a un molde para pasteles rectangular). Dejar leudar de nuevo durante unos 30-50 minutos.
Precalentar el horno a 180 grados, pincelar la superficie del pan con la yema de huevo batida y hornear el pan durante 25-28 minutos o hasta que esté dorado.
Nada más sacar del horno, rociar con agua y tapar con un paño durante 15 minutos.
Es un poco raro este pan de campo, dado que contiene productos diferentes al pan típico. Pero son ellos quienes le dan un sabor único. Debido a que no se amasa, sino que solo se remueve, es fácil de preparar.
¡Disfrute de su comida! El pan de pueblo sin amasar es genial.
