Modo de preparación
Para hacer la chapata necesitarás más tiempo porque requiere una fermentación más larga.
La masa de pan ciabatta, chapata o chabata está muy hidratada y será mejor trabajar con una batidora con los accesorios para la masa.
Tamizar ambos tipos de harina en un bol y añadir sal y una pizca de azúcar.
Calentar el agua a temperatura corporal y disolver la levadura en ella.
Añadir el agua y el aceite de oliva a la harina y mezclar.
Encender la batidora y mezclar a alta velocidad durante 7-8 minutos hasta que se forme una bola de masa y comience a separarse del recipiente.
Engrasar un molde rectangular con aceite de oliva y transferir la masa en él.
Cubrir el recipiente con film transparente y dejar que la masa duplique su volumen durante aproximadamente 1 hora.
Sin sacar la masa del bol con los dedos enharinados, estirar todos los extremos y doblar la masa varias veces.
Cubrir con papel aluminio de nuevo.
Repetir estos pliegues 2 veces más en 30 minutos.
Preparar una hoja de papel de horno y espolvorear generosamente con harina.
Luego, transferir la masa leudada sobre el papel.
Usando una espátula de repostería, divídala en dos partes. Formar dos panes oblongos con ayuda de la espátula y espolvorearlos con harina. Dejar que suban de nuevo, no más de 30 minutos, tiempo durante el cual precalentar el horno a 230ºC junto con la bandeja para hornear.
Colocar un recipiente con agua en la parte inferior del horno.
Una vez alcanzada la temperatura, trasladar los panecillos junto con el papel a la bandeja caliente. Hornear durante unos 30 minutos.
Dejar enfriar la chapata preparada sobre una rejilla y cepillar el exceso de harina.
Servir el pan chapata ligeramente tibio o completamente frío.
¡Buen provecho!