Modo de preparación
Limpiamos y deshuesamos las cerezas, luego las trituramos hasta obtener un puré fino y suave.
Mezclamos el vino blanco, el jugo de limón recién exprimido y la miel. Batimos con una batidora de alambre hasta que se disuelva la miel y se homogeneice la mezcla.
Combinamos el puré de fresas con el liquido obtenido (de vino, limón y miel). Vertemos la preparación en un recipiente no muy hondo y guardamos en el congelador.
Vamos revolviendo periódicamente - a cada 10-15 minutos, para no permitir que la mezcla se congele por completo. El sorbete debe obtener una consistencia de granizado.
Servimos el sorbete en copas adecuadas o cuencos y decoramos con cerezas. ¡Lo recomiendo para una bebida o postre refrescante en el verano!
El sorbete de cerezas con vino blanco está riquísimo.