Modo de preparación
Cuando agregamos toques de trufa al risotto de champiñones común, obtenemos un sabor diferente y muy interesante. Te invito a probarlo.
En lugar de la pasta de trufa preparada, puede utilizar una trufa entera enlatada y rallarla y mezclarla con un poco de mascarpone o nata y queso duro aromático.
Comience picando la cebolla y el ajo y fríalos en aceite de oliva sin que se doren, unos 3-4 minutos a fuego moderado. Agregue los champiñones limpios y picados y cocine por otros 3 minutos.
Vierta el arroz carnaroli y revuelva durante 1-2 minutos, luego vierta el vino y nuevamente, revolviendo constantemente, cocine hasta que el alcohol se evapore, aproximadamente un minuto.
Ahora viene el punto clave para cualquier risotto, que es ir añadiendo poco a poco el caldo caliente, removiendo constantemente. Hasta que no se absorbe una porción del líquido, no se agrega la siguiente.
El objetivo es formar una capa cremosa alrededor del arroz a partir del almidón que suelta (por eso se utiliza una variedad especial), pero al mismo tiempo los propios granos quedan firmes pero tiernos, al dente.
Todo el proceso de cocinar el arroz es de unos 15 minutos o el tiempo que indique el fabricante.
Dos minutos antes del final de la cocción, añadir la mantequilla, la sal, un puñado de pecorino rallado y un poco de pasta de trufa para darle sabor. Así conseguimos una cremosidad adicional.
El risotto se sirve tibio (si esperas, el arroz absorberá más humedad y se pasará, lo cual no es recomendable). Espolvorear con el pecorino restante, perejil, un poco de pimienta negra si se desea y una cucharada de pasta de trufa muy aromática.
¡Buen provecho!