Modo de preparación
Machacar los ajos en un mortero, junto con la sal y el perejil. Remover hasta que se convierta en una pasta, luego echar el aceite de oliva y el jugo de limón recién exprimido y remover nuevamente.
La salsa (aderezo) así preparada se puede refrigerar varios días y es apta para mariscos, verduras y carnes.
Da un sabor excepcional a cualquier plato.