Modo de preparación
La ortiga se coloca en un tazón grande. Se cubre con agua caliente para eliminar su propiedad de picar y así se ablanda ligeramente.
Se deja enfriar a una temperatura manejable para drenar bien y limpiar.
Se aprieta bien presionando con las manos, luego se limpia y se pica finamente.
La cebolla también se limpia y se pica finamente. La zanahoria se pela y se lava, luego se ralla en un rallador grueso. Las verduras preparadas se colocan en una olla con un fondo ancho.
Se agrega más aceite, el azúcar y el pimentón. Se revuelve todo y se deja sofreír brevemente.
A continuación se añade el jugo de tomate y la ajedrea. El guiso de ortiga se cubre con la tapa y se deja cocinar a fuego lento durante un rato.
Se calienta agua en una olla a presión. El agua hirviendo se echa al guiso y se tapa nuevamente para cocer a fuego lento. Se condimenta con sal y pimienta. Los huevos se cascan uno a uno directamente en la olla , procurando que caigan en diferentes lugares (no uno encima de otro).
Vuelva a colocar la tapa y deje que se cocinen. Pon la harina en un bol y mézclala con un poco de agua. Se agrega a la olla. Deja que hierva un poco más sin tapa.
El guiso con ortigas con huevos escalfados es un plato primaveral estupendo.