Modo de preparación
Si no tienes fermento natural, puedes hacerlo tú mismo mezclando agua y harina hasta obtener una pasta espesa.
Vierta en un frasco y deje reposar a temperatura ambiente, sin cerrar la tapa por completo. Al día siguiente alimenta la levadura con agua y harina y a los 2-3 días verás aparecer burbujas.
Vuelva a alimentar el fermento naatural con agua y harina (en la misma cantidad). Sin embargo, esta última alimentación debe ser justo antes de hacer el pan, para que la levadura esté fresca.
Mezcle la harina de trigo integral con la levadura natural y el agua. Amasar durante unos 10 minutos. De vez en cuando espolvorea un poco de harina o engrasa tus manos para que puedas amasar más fácilmente.
Coloque la masa terminada en un bol y déjela leudar durante aproximadamente una hora. Amasar una vez más, añadiendo ahora la sal.
Deje que suba nuevamente, esta vez durante al menos 6-8 horas, y el tiempo depende de la fuerza del fermento. También puede guardarla en el refrigerador por la noche.
Amasa la masa brevemente y darle forma redonda de pan de trigo integral.
Cubre una bandeja para hornear con papel y ponga el pan. Con un cuchillo afilado, haz cortes en su superficie y espolvorea con un poco de harina. Cubra con una toalla y deje leudar durante 2-3 horas.
Precalienta el horno a 200 grados. Hornee el pan durante 15 minutos y luego reduzca la temperatura a 180. Hornee durante aproximadamente media hora o hasta obtener un bronceado apetitoso.
¡El pan integral con fermento natural es una maravilla!