Modo de preparación
Esta sopa extremadamente reconfortante es rápida y fácil de preparar y es muy eficaz para combatir los resfriados en los días fríos de invierno.
Es parecida a a sopa de ajo madrileña, y le he añadido el jengibre, que es conocido por su efecto beneficioso contra los resfriados tan molestos.
Picar los dientes de ajo limpios y cortar el jamón en cubitos pequeños. Yo uso jamón, pero se puede poner cualquier carne similar.
Calentar el aceite de oliva a fuego lento, es bastante cantidad, pero así debe ser. Dejar que el ajo libere su aroma, agregar los cubitos de jamón y remover durante 3-4 minutos o hasta que estén ligeramente dorados.
Echar el pimentón, remover durante 30 segundos (a fuego lento para evitar que se queme) y verter el caldo. Para ello, rallar alrededor de 1 cucharada de raíz de jengibre fresca y sazone con una pizca de comino y sal si es necesario (depende de la salinidad del caldo y el jamón)
Cocine por 20 minutos con la tapa cerrada a fuego moderado.
Cascar un huevo en el caldo aromático hirviendo y mezclar rápidamente hasta que se formen hilos. Hacer lo mismo con el segundo huevo.
Si lo desea, agregue una cucharada o dos de vinagre a la sopa.
Sirva la sopa de ajo muy caliente y adorne con picatostes.
¡Disfrute de su comida!
