Modo de preparación
Horno precalentado a 175 grados;
Molde desmontable engrasado con mantequilla y forrado con papel de hornear, 22-24 cm de diámetro.
Vierta la harina, el azúcar glass, la levadura en polvo, una pizca de sal en un bol y mezcle con un batidor de varillas. Coloca encima la mantequilla en cubitos, relativamente blanda, no es necesario que esté fría.
Y con una batidora de mano, cuchillo o tenedor se lleva hasta obtener migas gruesas. Agrega el huevo, la leche, la piel de limón rallada y la vainilla. Mezcle hasta obtener una masa homogénea. Envuélvela en film transparente y guárdala en el frigorífico por unos 30-40 minutos. Mientras tanto prepara el relleno.
Mezclar la ricotta con el azúcar glass, remover hasta que esté cremoso, agregar los trocitos de fresa y la maicena.
Dividir la masa enfriada en dos partes, envolver una en film transparente y dejar en el frigorífico.
Marcar el diámetro del molde unos 22-24 cm sobre papel de horno. La masa para el fondo se extiende en una hoja de unos 28 cm de diámetro, de modo que se puedan cortar tiras para formar un borde alto.
La masa se corta a lo largo de la parte inferior del molde, se coloca en él y se presiona ligeramente. A partir de los recortes se forman tiras, deben tener unos 4 cm de altura. Las tiras se colocan alrededor de la masa en el molde. Se presionan ligeramente hacia abajo para que se peguen a la base. Se vierte todo el relleno, se aplana.
La masa restante se extiende con un diámetro exactamente acorde a la forma del molde utilizado y se pone sobre el relleno para cubrirlo. Las dos masas se pegan uan a otra para que no se salga el relleno.
Si queda un poco de masa quebrada, puedes hacer las figuritas que prefieras. Le di forma a 3 pétalos pequeños. Los puse en el medio pegandolos con un poco de agua.
Hornee en horno precalentado a 175 grados durante unos 35-40 minutos.