Modo de preparación
Cocemos los muslos de pollo en agua suficiente para cubrirlos.
Una vez listos, los retiramos del agua.
En una olla, ponemos los floretes de brócoli, la nata, el queso, las especias y mezclamos bien. Echamos un poco de agua si es necesario. Cocinamos hasta que los brócolis estén tiernos.
Finalmente incorporamos los muslos de pollo deshuesados y picados.
Servimos con queso cheddar rallado por encima, ya que da un sabor excepcional a la sopa de pollo.
¡Buen provecho!