Modo de preparación
Batir las yemas con el azúcar. Verter la leche y la nata y colocar al baño maría a 90 grados durante 8 minutos. Sea preciso en los grados y minutos, porque de lo contrario corre el riesgo de que las yemas se cocinen y el helado de leche pierda su sabor y textura.
Añadir la vainilla y una pizca de sal y mezclar.
Verter la mezcla en un recipiente con tapa, apto para congelador, o en una máquina para hacer helados. Debe quedar en una capa de no más de 4 cm de espesor, si no es una máquina de helados, entenderás por qué en un momento.
Dejar que la mezcla se enfríe y guardarla en el congelador durante 10 horas.
Si usaste una máquina para hacer helados, debería estar lista, en cuyo caso tostar los pistachos en una sartén seca, trocearlos y agregarlos al helado.
Sin embargo, si se congela en un recipiente normal, se pueden formar cristales.
Para que su helado vuelva a estar esponjoso y suave, dejarlo em el frigorífico para que se enfríe durante 20 minutos. Luego triture y ponga las piezas en una licuadora. Molerlo dos veces cada pocos segundos para no forzar el aparato. De esta forma, romperás los cristales que se hayan podido formar y el helado casero de pistacho quedará esponjoso y suave. Mézclalo con los fragantes pistachos tostados y sirve.
¡Buen provecho!