El caqui sólo aparece en el mercado unas semanas al año. En otoño, cuando las heladas son más frecuentes, los caquis se ablandan y se vuelven comestibles. La mayoría de la gente dice que se enamoraron de los caquis a primera vista. Hay muchas variedades de caquis, pero los que se encuentran en el mercado son sólo dos: el naranja claro, que tiene una apariencia más plana, y el naranja oscuro, que es más largo y más grande.
Los caquis oscuros se pueden comer antes de que estén lo suficientemente blandos, y los que son más claros y planos deben estar casi demasiado maduros antes de poder cortarlos y comerlos.
- Al igual que las zanahorias, la calabaza y las batatas, el color naranja de los caquis saludables indica que tienen una gran cantidad de betacaroteno. En el interior de tan solo 1 caqui encontrarás toda la dosis de vitamina C que necesitas para el día.
¿Y cómo elegir un buen caqui?
- Para elegir un caqui maduro se deben buscar frutas que tengan un color uniforme y sean de la misma densidad y firmeza, sin lesiones visibles ni marcas oscuras en la piel. La mejor opción es conseguir unos caquis más blandos y otros más duros para poder comerlos durante al menos 3-4 días;
- Es bueno conservar los caquis elegidos a temperatura ambiente sobre una superficie seca donde puedan madurar. Una vez que estén blandas, puedes comerlas con una cuchara, primero cortando la tapa y luego sacando el interior.
Puedes experimentar con estas deliciosas y jugosas frutas en la cocina. Prepare pasteles de caqui u otros postres. Las recetas con caquis son exóticas y muy ricas.