Quizás la fruta veraniega más refrescante sea la sandía fresca. Es aromática y sabrosa. A partir de sandía podemos hacer refrescos extremadamente fáciles de preparar, por lo que incluso los cocineros novatos que no tienen experiencia en la cocina pueden.
Para sorprender gratamente a tu familia con un refresco de sandía necesitas una sandía madura, un exprimidor o batidora y algo de hielo.
Primero debe quitar la cáscara de sandía. Luego debes cortarla en pedazos, limpiar las pipas/semillas y triturar en una licuadora. Puede agregar 2-3 cubitos de hielo. Mezcle bien y sirva, adornando cada porción con 1-2 ramitas de menta fresca.
El refresco de sandía natural no solo es sabroso y refrescante, sino que también tiene un efecto beneficioso para el organismo, ya que es rica en azúcar fácilmente digerible: glucosa y fructosa. Pero su capacidad más importante es eliminar la orina alcalina del cuerpo, por lo que a menudo se puede escuchar que la sandía fresca es un limpiador de riñones.
El consumo regular de refresco de sandía ayuda a eliminar las sustancias tóxicas de los tejidos, previene la formación de cálculos renales, enfermedades del corazón, enfermedades del hígado, también en el tratamiento de la gota y la anemia.