Yufka con leche y queso o un simple pastel de yufka con leche son algunas de las recetas de la cocina búlgara más populares. Pero la verdad es que nada se puede comparar con el sabor de la yufka casera.
Hacer yufka casera no es una tarea difícil, pero requiere tiempo además de espacio en la cocina.
Para preparar una ración de yufka casera, necesitarás 500 ml de leche, 15 huevos, 1 cucharada de sal y 1.5 kg de harina.
Batir los huevos con la sal hasta que estén espumosos. Tamizar la harina en una bandeja grande y añadir poco a poco los huevos batidos y la leche, removiendo constantemente. De los productos se debe obtener una masa suave, que se pueda estirar fácilmente con un rodillo.
La masa se divide en quince bolitas y se deja reposar tapada con un paño o gasa ligeramente humedecida. Luego, cada bola se debe estirar hasta formar una corteza extremadamente fina, de no más de 2 mm de espesor.
La masa de yufka extendida debe dejarse secar en un lugar soleado o en una habitación adecuada. Después de eso, las hojas secas se deben secar más en el horno.
Esto se hace en un horno precalentado a 50 grados, donde se secan las hojas de yufka casera hasta que estén bien secas. Luego las hojas se rompen y se guardan en bolsas de papel, donde están listas para su uso.
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