La soja ha sido conocida por los humanos desde hace muchos años. Se considera que la patria de la soja es China, donde la soja y el arroz son alimentos tradicionales. Su traslado al viejo continente se realiza a través de Rusia.
Hoy en día, la soja se encuentra entre los cultivos más extendidos, lo que se debe al hecho de que la soja es una materia prima valiosa para la producción de análogos de leche y carne, y el rendimiento por hectárea es extremadamente alto. Además, la soja contiene muchas proteínas y aminoácidos esenciales.
La soja es un alimento frecuentemente consumido y preferido por vegetarianos y veganos, y no solo porque tiene un efecto beneficioso sobre el organismo. Aquí hay algunas razones por las que deberíamos incluir la soja en nuestro menú. Nos protege del cáncer, acelera el metabolismo, mejora la circulación sanguínea, mejora la digestión, es útil para la menopausia, mejora el estado del sistema cardiovascular.
Ahora es el momento de señalar que los frijoles de soja tostados son un gran aperitivo de cerveza que puedes preparar fácilmente en casa. Y para aquellos cocineros novatos que no saben cómo tostar soja, enseguida lo explicamos.
Primero, la soja se lava bien. Una taza de soja se sumerge en cuatro tazas de agua. La proporción de agua y soja es siempre 1:4. También se agrega una cucharada de bicarbonato.
La soja empapada de esta manera se deja durante unas 10-12 horas.
Pasado este tiempo, se vuelve a lavar y se extiende sobre una toalla para que se seque. Cuando los granos de soja estén completamente secos, colóquelos en una sartén, sazone con sal y puede agregar otras especias a su gusto. La soja se tuesta en el horno durante una media hora a 180 grados, removiendo de vez en cuando. Debe dorarse ligeramente.