Mucha gente piensa que la recomendación de no consumir pescado y leche juntos no tiene mucho sentido y que esta combinación no tiene nada de peligroso para la salud. Sin embargo, es bueno señalar que hay mucho de cierto en este antiguo consejo. Se produce una reacción química entre el pescado y la leche, que resulta de la imposibilidad de descomponer las moléculas de proteínas de diferente origen.
La consecuencia de esto puede ser peligrosa - una intoxicación. Sin embargo, es bueno tener en cuenta que no todas las personas que han consumido pescado y leche juntos han tenido quejas. Sin embargo, esto no debería tranquilizarnos, porque nunca se sabe si la combinación de pescado con leche no provocará una intoxicación grave. Incluso si no se produce intoxicación, una persona puede experimentar malestar y dolor estomacal severo.
Es bueno señalar que en la práctica culinaria mundial muy a menudo el pescado se sirve con salsa de nata. Por lo tanto, si aún decide probar esta combinación, debe asegurarse de que el pescado sea de buena calidad y esté bien fresco. Lo mismo ocurre con la leche/nata. Porque si se acumulan microorganismos patógenos, puede surgir un problema incluso cuando se consumen individualmente.
Otra condición importante para atreverse a probar este par de alimentos es el buen estado de salud de la mucosa intestinal. Cuando la mucosa está sana, es una barrera natural para las toxinas que no pueden penetrar la sangre, pero de lo contrario no hay forma de procesar los ingredientes de los dos productos.
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