El arroz se utiliza en la preparación de numerosos platos y es un alimento básico en las gastronomías de muchas naciones. En una gran mayoría de los platos, el arroz se hierve. Para cocinar perfectamente éste cereal se necesitan aproximadamente 2 partes de agua y una parte de arroz, también una cacerola con tapa hermética. Las proporciones pueden variar según la variedad de arroz que se utiliza en la receta.
Hay muchas variedades de arroz que tienen una consistencia diferente cuando se cocinan. El arroz, preparado con una receta clásica, puede desempeñar el papel de un plato independiente o un ingrediente en la implementación de recetas complejas con arroz.
Lave bien los granos de arroz hasta que el agua salga completamente clara y limpia. El agua turbia significa que el arroz contiene mucho almidón, lo que lo vuelve pegajoso cuando se cocina.
Llevar el agua a ebullición, agregar sal, verter el arroz y cerrar la olla con tapa. No abra la tapa, ni revuelva el arroz. Cocine durante cinco minutos a fuego fuerte.
Luego reduzca el fuego a medio y cocine por dos minutos. Los últimos minutos de cocción del arroz deben ser a fuego muy lento hasta que absorba el liquido (el tiempo dependerá de la cantidad y la variedad del arroz) Cuando esté echo, retire del fuego.
No abra la tapa durante unos minutos, luego destapa y encontrará un arroz blanco cocido perfecto, con los granos sueltos.
Lo bueno de éste método de cocción es que el arroz no se pasa y no hay riesgo de que se queme.
Sirve el arroz cocido con una salsa de carne asada, a la que has añadido especias al gusto - secas o frescas, finamente picadas.
Puede preparar la salsa para el arroz cortando carne de pollo en trozos pequeños y friéndolo, luego agregue cebolla y pasta de tomate y guise hasta que la carne se ablande.
Eso sí, no debemos ignorar las recetas clásicas de pollo con arroz, pimientos rellenos de arroz, espinacas con arroz, pollo relleno con arroz, arroz con leche, paella y mucho más. Aquí en Bonapeti hay algunas recetas de arroz maravillosas.
