Frosting o glaseado y icing son sinónimos del mismo concepto, al que también llamamos cobertura. El glaseado es una masa dulce y cremosa hecha de azúcar y líquido, generalmente agua o leche. A veces se puede enriquecer con otros ingredientes como mantequilla, queso crema, aromatizantes o clara de huevo. La clara de huevo añadida le da el nombre glaseado real.
Sirve como cobertura en varios productos horneados: pasteles, galletas, muffins o cupcakes. Se puede colorear con tintes de pastelería de diferentes colores, con cacao, decoraciones comestibles y otras decoraciones que agregan belleza y valor a los productos de panadería y pastelería.
El frosting más simple está hecho con azúcar en polvo y agua. Se puede colorear o aromatizar reemplazando el agua con limón, por ejemplo. El glaseado más complejo se logra batiendo la grasa en el azúcar en polvo, o derritiendo la grasa y el azúcar, o usando claras de huevo para hacer el llamado glaseado real.

El propio glaseado se aplica a la base, que se decorará, con algún utensilio - cuchillo, espátula, por goteo o inmersión, extendiendo y cubriendo todo el molde. Se puede usar de relleno entre bizcochos, o para cubrir totalmente o parcialmente la parte superior de un pastel u otro producto de pastelería.
La práctica llamada frosting o glaseado/icing se introdujo en el siglo XVII. Sin embargo, los primeros intentos datan de alrededor de 1600 y el término icing se ha utilizado desde 1683.
La práctica del frosting otorga individualidad a los productos culinarios, porque en ellos se ha puesto amor, esfuerzo y creatividad personal. La galleta pintada a mano es un regalo navideño invaluable porque es única en sí misma y única en su tipo con su decoración.
Aquí se explica cómo hacer glaseado casero para decorar galletas o un pastel festivo.
Productos requeridos:
1 clara de huevo
1/4 kilogramo de azúcar en polvo
1 cucharada de maicena
1 cucharada de jugo de limón
1 vainilla
Preparación:

Mezcle todos los ingredientes excepto el jugo de limón en un bol y bata con una batidora durante 3 minutos a velocidad baja del aparato. Agrega el jugo de limón y bate por unos segundos más.
La crema resultante es espesa y se coloca en una manga pastelera, con ella se pueden hacer flores y figuras.
Si se bate con un poco más de agua, se puede rociar sobre galletas o pasteles en forma de puntos u otras figuras pintadas.
Los pasteles así decorados se secan a temperatura ambiente. Cuando estén completamente listos, se pueden guardar en el refrigerador.