El propóleo es una mezcla de cera, resinas y polen de las flores o capullos de las plantas. La mezcla está enriquecida con enzimas y ya ha pasado por la fermentación del ácido láctico en el sistema digestivo de las abejas. El propóleo es un producto de las abejas muy beneficioso que recibe una merecida atención en cosmética y medicina.
Al recolectarlo, las abejas también lo usan como material de construcción y desinfectante para su colmena. Una colonia de abejas de tamaño medio puede recolectar de 100 a 300 g de propóleos al año. De gran importancia para la cantidad recolectada son el tipo de abejas, las latitudes en las que se encuentran, las peculiaridades del clima, las especies de plantas.
Las abejas recolectan propóleo de las plantas, siendo las fuentes más comunes de propóleo: trigo sarraceno, álamos, sauces y castaños de Indias. Durante el proceso de recolección, literalmente toda la colmena de nuestros amiguitos se cubre con propóleo, incluso ellos mismos se cubren con él para protegerse de los microorganismos dañinos. El pulido de las paredes de las celdas pequeñas con propóleos aumenta su resistencia física, y en tiempo frío se restringe el flujo de aire en la colmena.
En esencia, el propóleo es una sustancia resinosa que tiene un color brillante que va del amarillo oscuro al marrón verdoso. Recién extraído de la colmena, el propóleo es una masa pegajosa y blanda.
El propóleo también tiene un aroma muy agradable, que se puede definir como una mezcla de miel, cera y brotes de plantas. Se oscurece con un almacenamiento prolongado y emite un olor muy agradable a resina cuando se quema. Cuando se calienta ligeramente, se ablanda muy rápidamente y se vuelve fácil y cómodo de manejar.
Composición del propóleo
El propóleo tiene una composición química muy compleja, y algunos de sus componentes aún no han sido especificados. Su composición incluye cera, resinas vegetales, polen y aceites esenciales, impurezas mecánicas y sustancias curtientes, flavonoides, glucósidos, ácidos orgánicos, ésteres, aldehídos, terpenos, aminoácidos, alcoholes, hidrocarburos, ácidos grasos libres, una serie de oligoelementos, vitaminas B1, B2, B6, A, C y E.
La composición del propóleo en números se ve así:
- cera y ácidos grasos - del 25 al 35% de origen vegetal y apícola; - 10% de aceites esenciales;
- aproximadamente un 55 % de resinas vegetales, que incluyen éteres, ácidos fenólicos y flavonoides;
- 16 aminoácidos y 5% de polen;
- agrinas y prolina – hasta 45%;
- Impurezas de diferentes tipos - 5%.
Método de recogida de propóleo
El propóleo se recoge raspando la superficie superior de las paredes o marcos de la colmena con un levantador de marcos. Se forman bolitas y se colocan en bolsas de plástico o fin transparente. Luego se guardan en el refrigerador. Otra forma de recolectar la sustancia útil es colocando redes o rejillas especiales con abertura no más grande que 5 mm. El objetivo es tapar los pequeños agujeros con propóleo. A continuación, las redes o rejillas usadas se refrigeran. A bajas temperaturas, el propóleo se vuelve quebradizo y se separa fácilmente de ellos.
Selección y almacenamiento de propóleo
Es muy conocida en el mercado la solución alcohólica de propóleo, que se encuentra bajo el nombre de tintura de propóleo. Si aún tiene la oportunidad de obtener propóleo puro de un apicultor, debe almacenarlo en un lugar oscuro y seco, lejos de cualquier sustancia que desprende olores. La temperatura no debe ser superior a 25 ºC. Si sigue las pautas anteriores, lo mantendrá por más tiempo. En caso de que no tenga la oportunidad de comprar o almacenar propóleo, también puede comprar propóleo en cápsulas.
Aplicación y beneficios del propóleo
El propóleo contiene una gran cantidad de aceites esenciales volátiles que tienen fuertes propiedades antimicrobianas. La acción antimicrobiana del propóleo se ha estudiado muy bien en relación con una serie de bacterias: Staphylococcus, Salmonella, Streptococcus haemolyticus, Bacillus haemolyticus. El propóleo tiene un fuerte efecto antifúngico, especialmente contra varios tipos de hongos inferiores, que son los culpables de algunas enfermedades en la piel y su parte pilosa. Tiene un efecto particularmente fuerte contra los siguientes hongos: Ahorion, Candida albicans, Epidermophytom, Mikrosporium. El propóleo es uno de los pocos ingredientes naturales que tiene un fuerte efecto antiviral.
Los resultados de las investigaciones realizadas dan motivos para creer que el propóleo es un agente profiláctico muy fuerte contra la reacción a la radiación y también es un buen agente de tratamiento contra el daño por radiación. Casi no hay duda sobre las fuertes propiedades anticancerígenas y antitumorales del propóleo.
Los flavonoides del propóleo son una de sus principales sustancias curativas, por lo que se recomienda en el tratamiento de más de 40 enfermedades. El principal efecto terapéutico está dirigido al sistema capilar y al estado de los vasos. Tiene un buen efecto vasodilatador, tiene un efecto diurético y colerético. Además, el propóleo tiene un efecto beneficioso sobre las glándulas con secreción interna como la glándula tiroides, el timo, las glándulas suprarrenales, el páncreas. El propóleo aplicado externamente se usa para tratar heridas purulentas, traumáticas, eccemas y quemaduras.
El propóleo encuentra una aplicación muy amplia en el tratamiento de diversas enfermedades respiratorias, enfermedades del sistema nervioso periférico - ciática, plexitis, radiculitis, neuritis y neuralgia; Enfermedades de la piel. Es muy efectivo en enfermedades del sistema digestivo: colitis, dispepsia, gastritis, estomatitis, aftas, úlceras y otras. Trata enfermedades ginecológicas: erosión del cuello uterino, tricomonas. Es muy utilizado en dentífricos y enjuagues bucales.
