Las setas son muy valoradas en el mercado por su sabor específico y su aroma superior. Los hongos blancos congelados forman parte del menú de muchas cocinas de todo el mundo. Los recolectores de setas experimentados saben que las setas deben recogerse después de fuertes lluvias en los meses de junio a octubre. Los hongos habitan en bosques mixtos, sitios de poscosecha y bosques de abedules. Se pueden preparar tanto frescos como secos, enlatados y congelados.
Los boletus congelados se preparan con mucha facilidad. Para empezar, los hongos deben descongelarse antes de su uso. La mayoría de las veces, los hongos blanco se congelan enteros e incluso sin lavar. Durante la descongelación, se lavan con agua corriente. Hay que limpiarlos a fondo y para ello se puede raspar una capa muy fina con un pelador de verduras.
Las setas dan un sabor específico muy fuerte a casi cualquier plato. Se pueden cocinar en sopa, salsa, crema, guisos, fritas o salteadas. Permiten cualquier tipo de elaboración y son muy sabrosas.
El sabor de los hongos blancos (boletus edulis o seta de calabaza) combina bien y complementa tanto con la salsa bechamel como con la salsa de tomate. A la hora de preparar las setas con salsa, basta con trocearlas, saltearlas y cocinarlas a fuego lento para que impartan su sabor.
La pasta también es una muy buena opción para acompañar este tipo de hongo. A la hora de preparar los hongos blancos congelados en esta combinación, se recomienda picar y saltearlos, y añadirlos sólo después de terminar el plato.
Las tortillas también combinan a la perfección con setas de calabaza picadas y salteadas.
La combinación de setas y ternera es inmejorable. Por lo general, el tiempo de cocción es más largo que el de otras carnes, pero a costa de esto, los hongos blancos logran darle el máximo de su sabor sin condimentar al plato cuando se cortan en rodajas y se mezclan con el caldo.
Sin duda, las propiedades beneficiosas de las setas de calabaza son numerosas. Tienen propiedades antiinflamatorias, reduciendo los síntomas de algunas inflamaciones.
Este tipo de setas es una buena incorporación al menú de los vegetarianos que no pueden obtener la cantidad necesaria de hierro y proteínas, ya que las setas son ricas en estas sustancias.
El hongo blanco o boletus edulis también es rico en proteínas, lo que ayuda a mantener la salud muscular y un peso saludable. Además, gracias a su alto contenido en fibra, ayudan al movimiento de los intestinos e incluso según la medicina popular, se utilizan para tratar enfermedades renales.
Pero es importante saber que son sumamente difíciles de digerir para el organismo y no se recomienda consumirlos en la cena y dárselos a niños pequeños. Los hongos blancos congelados contienen 23 kcal, menos que los frescos.
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