La leucina es un aminoácido esencial que aporta una serie de beneficios para la salud. La leucina pertenece a los tres aminoácidos de cadena ramificada, que se denominan con la abreviatura BCAA.
La leucina y los otros dos aminoácidos (isoleucina y valina) no pasan por el mecanismo hepático, sino que se almacenan en el tejido del músculo esquelético.
La principal acción de la leucina es estimular la síntesis de proteínas en los músculos, por lo que estos últimos crecen gradualmente. Este aminoácido no puede ser sintetizado por el cuerpo y, por lo tanto, siempre debe obtenerse de la comida.
Beneficios de la leucina
La principal función biológica de la leucina es estimular la síntesis de proteínas en los músculos. La leucina ayuda a fortalecer la piel, los huesos y el tejido muscular. Al mismo tiempo, estimula la síntesis de el aminoácido glutamina.
La leucina es superior a otros aminoácidos para inducir una respuesta de insulina. Crea las condiciones para la liberación prolongada de insulina, lo que, a su vez, crea un mayor efecto anabólico de la insulina en el cuerpo.
La leucina tiene un efecto extremadamente beneficioso sobre el rendimiento deportivo. Ayuda a preservar los músculos y proporciona energía al cuerpo cuando está bajo estrés.
Conservas de leucina glucógeno muscular: glucosa que se almacena en el tejido muscular y se utiliza para alimentar la contracción muscular. Mantiene el equilibrio de nitrógeno y mejora la actividad mental.
La leucina puede ayudar a aumentar la somatropina, una hormona que fortalece las articulaciones, retarda el proceso de envejecimiento, ayuda a reducir la grasa corporal y aumenta la fuerza y la masa muscular.
Además de todos los beneficios de los deportes de fuerza, la suplementación con leucina puede beneficiar a las personas con fenilcetonuria. Este es un estado en el que el cuerpo no puede sintetizar el aminoácido fenilalanina.
La leucina es un componente esencial de la hemoglobina y, al mismo tiempo, ayuda a regular los niveles de azúcar en sangre, la producción de la hormona del crecimiento y la cicatrización de heridas.
En combinación con los otros dos aminoácidos, isoleucina y valina, la leucina ayuda a tratar algunos casos de encefalopatía hepática.
Las personas con problemas de hígado y riñón pueden beneficiarse de este aminoácido único porque puede mejorar la síntesis de proteínas en el hígado, mejorar la capacidad respiratoria y la calidad del sueño.
Fuentes de leucina
La leucina se encuentra en altas concentraciones en la carne y los productos lácteos, especialmente la proteína del suero. En menor medida, se encuentra en la soja, el arroz integral, las almendras, el germen de trigo, los guisantes, los anacardos, las lentejas y el maíz.
Ingesta de leucina
La dosis diaria de leucina como complemento alimenticio para personas que no hacen ejercicio es de unos 16 mg/kg, y para quienes hacen ejercicio se debe duplicar.
Para tomar suplementos de leucina de manera óptima, es mejor tomarlos por separado de otros suplementos de aminoácidos/proteínas.
Se obtienen resultados óptimos cuando se toma leucina entre 30 y 60 minutos antes y después del entrenamiento para crear las condiciones para el crecimiento muscular.
Después de tomarla por vía oral, la leucina se absorbe en el intestino delgado y se transporta al hígado, donde se descompone en varios pasos.
Deficiencia de leucina
Aunque la deficiencia de leucina es relativamente rara debido a su amplia distribución en las proteínas, tanto de origen vegetal como animal, puede deberse a una ingesta insuficiente de vitamina B6.
La deficiencia de leucina también puede deberse a un esfuerzo físico intenso, en cuyo caso se manifiesta como síntomas de hipoglucemia: fatiga, mareos, irritabilidad, dolor de cabeza, etc.
Daños de la leucina
Existe cierta evidencia de una relación entre el exceso de leucina en la dieta y el desarrollo de pelagra. Por este motivo, no se debe excederse tanto con los complementos alimenticios que contienen leucina como con sus fuentes naturales.