Los higos secos son muy buenos para la salud, porque contienen una combinación única de vitaminas y oligoelementos. Basta comer un puñado de higos secos durante diez días y notarás que la piel de tu rostro está más fresca, tus uñas y cabello brillarán y adquirirán un aspecto saludable, tu digestión estomacal mejorará.
Los higos secos son ricos en fructosa de fácil digestión, que satisface los gustos por lo dulce sin dañar el organismo como los postres pesados.
Las calorías de los higos secos tienen un efecto tónico y llenan el organismo de energía vital, que no afecta a tu figura.En los higos secos, las sustancias valiosas no desaparecen, sino que se concentran y aumenta el contenido de azúcar de la fruta.
Si quieres secar higos cortados en dos, espera a que se enfríen un poco en el frigorífico antes de cortarlos. Cuando están blandas y calentitas es muy difícil que un cuchillo las atraviese porque están pegajosas.
Sumerge la hoja del cuchillo en agua caliente de vez en cuando. La forma más sencilla de cortar higos frescos por la mitad es utilizar unas tijeras grandes y afiladas.
Muchas recetas de higos no se elaboran con frutas frescas sino con frutas deshidratadas porque son mucho más beneficiosas por la acumulación de vitaminas y minerales debido al secado.
Los higos se secan al sol para absorber el calor de los rayos solares. Cuando los primeros higos maduran, se recogen, se secan, se extienden sobre rejillas y se cubren con una gasa o un paño fino.
Los higos permanecen al sol durante diez días, luego se aplastan ligeramente para que ocupen menos espacio, y se dejan a la sombra hasta que se deshidraten del todo.
Para evitar que los higos se agrien con el sol, antes de colocarlos en las rejillas, los frutos se derriten sumergen unos segundos en almíbar de azúcar caliente.
Los higos se colocan uno al lado del otro, pero de manera que no se toquen, y necesariamente con el tallo hacia arriba. Los higos están lo suficientemente secos cuando su interior se vuelve espeso como mermelada y la piel es elástica.
Los higos secos se pueden cubrir con una pasta blanca: son cristales de azúcar. Las variedades de higos claras, no oscuras, son las más adecuadas para secar.
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