Desde la antigüedad, los pétalos de la rosa damascena se han utilizado con fines medicinales, ya que en ellos se concentran sustancias biológicamente activas, y especialmente nuestro conocido aceite esencial fragante y curativo - aceite de rosa.
Los componentes beneficiosos de los pétalos de rosa son monoterpenoides como geraniol, nerol y citronelol, estearoptenos, citral, linalol, benzaldehído, taninos como catequinas, quercitrina, quercetina y también ceras naturales, azúcares, etc.
Para el tratamiento, los pétalos de Rrosa damascena se recolectan durante el período de floración y se utilizan tanto frescos como secos. Se utilizan en forma de varios extractos, decocciones, infusiones, agua de rosas, aceite de rosas y otros.
Tienen efecto depurativo, colerético, antiparasitario, antimicrobiano, cicatrizante, antiulceroso, antiespasmódico, ayuda en quemaduras por radiación, bronquitis asmática y asma, intestino perezoso, encías sangrantes, heridas infectadas, lombrices, etc.
La vitamina C contenida en los pétalos actúa como antioxidante y además participa en el intercambio y correcta absorción de proteínas, carbohidratos, colágeno, dopamina, hierro, potasio y calcio. Esto implica su necesidad para fortalecer el sistema inmunológico y organizar funciones inmunológicas importantes.
A continuación, profundizaremos en las propiedades curativas de la rosa damascena.
Digestión y el metabolismo
Las sustancias beneficiosas de la rosa damascena favorecen el metabolismo en los sistemas digestivo y endocrino, mejoran el peristaltismo y la salud intestinal, la absorción de grasas. Funcionan excelentemente para el estreñimiento, flatulencia, úlcera estomacal, regulan la secreción gástrica. Los ingredientes de la rosa damascena ayudan en la formación del jugo biliar y su evacuación rápida e indolora de la vesícula biliar. También se cree que la rosa tiene un efecto prebiótico, ya que nutre las bacterias intestinales beneficiosas.
Ansiedad y estrés
El extracto de rosa damascena tiene un efecto tonificante sobre la fatiga y el esfuerzo físico y mental, aumentando la resistencia física y agudizando la mente. Al mismo tiempo, relaja el estrés y mejora el sueño. También se utiliza como agente relajante y calmante en aromaterapia.
Para el dolor menstrual y el síndrome premenstrual
La infusión rosa damascena alivia los síntomas del síndrome premenstrual y actúa como analgésico y antiespasmódico durante el ciclo menstrual femenino. Además, el agua de rosas se usa con éxito para lavados femeninos para eliminar o calmar las inflamaciones.
Para las vías respiratorias y la cavidad bucal
La rosa damascena favorece la lucha contra afecciones como el asma bronquial, bronquitis espástica y asmática, tos ferina, fortalece el sistema inmunológico. Hacer gárgaras con extracto de rosas o agua de rosas ayuda calmar la inflamación de las encías, la angina y la voz ronca.
Para heridas y quemaduras
Está científicamente comprobado que, aplicado externamente, el aceite o extracto de rosa trata con éxito heridas de difícil cicatrización y postoperatorias, úlceras, heridas purulentas y varicosas, necrosis, radiaciones y quemaduras habituales, etc. Al mismo tiempo, también tiene un efecto anestésico local.
En cosmética
Los componentes químicos de la rosa damascena incluyen vitamina C, taninos y grasas vegetales, etc. Gracias a ellos tiene propiedades antioxidantes, nutre, suaviza, calma y refresca la piel, y además alivia las inflamaciones cutáneas gracias a sus propiedades antimicrobianas y cicatrizantes.
