El romero no solo da sabor a los platos y los hace más sabrosos, sino que también ayuda mucho a mantenerte saludable y con energía. El romero ya se usaba en la Antigua Grecia, Roma y Egipto. El romero se ha utilizado en la cocina italiana, francesa y española durante siglos.
El romero tiene un fuerte aroma dulce que recuerda al enebro y su sabor es ligeramente picante. Las hojas tiernas, ramitas y flores de romero se utilizan como especia frescas y secas.
El romero se añade en varios tipos de ensaladas de verduras, en platos de pollo, pescado, ternera, cordero y, con menos frecuencia, al cerdo. El conejo adquiere un aroma más agradable si se cocina con romero.
La carne de pato y codorniz es mucho más aromática y sabrosa si se le añade romero durante su preparación. Esta especia sabrosa y aromática se utiliza para realzar el sabor y el aroma de platos y sopas de champiñones.
El romero se usa a menudo para preparar la marinada para diferentes tipos de carne. Mezclado con otras especias, el romero se agrega a varios tipos de salsas.
Los quesos de pasta blanda o duros se vuelven mucho más sabrosos si espolvorearlos con romero. Los platos con patatas cambian de sabor y aroma si se les añade romero.
La masa de pan se vuelve mucho más sabrosa si le agregas un poco de romero. La sopa de tomate es más aromática con romero, y sin esta especia, la carne a la parrilla no tiene este sabor tan rico.
El consumo de platos con romero ayuda a una buena digestión, fortalece la inmunidad y el sistema nervioso, es beneficiosa para problemas de presión arterial demasiado baja.
Puedes utilizar romero en combinación con mantequilla y perejil finamente picado. Esta pasta se unta debajo de la piel ligeramente levantada de pollo o aves silvestres, o se embute en pequeñas incisiones hechas en carne de cerdo, ternera o cordero.
El romero no se lleva muy bien con las hojas de laurel, por lo que no es bueno combinar estas dos especias en diferentes platos y sopas.
La salsa de romero se usa a menudo en la cocina europea. Se prepara a partir de:
100 gramos de perejil, 100 gramos de cebolla, 20 gramos de romero, 300 mililitros de vino tinto, 500 mililitros de caldo de carne, 40 gramos de mantequilla, 2 cucharadas de aceite de oliva, sal y pimienta al gusto.
Modo de preparación: Se fríen cebollas y perejil finamente picados en aceite de oliva, se añade vino y romero. Cocine a fuego lento hasta que el líquido se reduzca a la mitad. Agregue el caldo y cocine a fuego lento hasta que espese un poco. Añadir la mantequilla y batir con una batidora. Condimentar con sal y pimienta.