La baya de Goji o coral, se ha utilizado desde la antigüedad, pero el interés por ella aumentó a principios del siglo XXI, cuando esta planta ganó fama mundial. Esto se debe tanto a sus indiscutibles cualidades medicinales y culinarias, como a su valor decorativo.
Los arbustos de bayas de goji bien mantenidos tienen coronas abundantes ricamente frondosas con hojas pequeñas, flores pequeñas y frutos que comienzan a madurar a partir de agosto.
La baya de Goji es relativamente fácil de cultivar tanto en condiciones de campo como en casa, en una maceta. La planta es muy resistente al frío y tolera fácilmente las bajas temperaturas. Cuando se cultiva en macetas, debe prepararse con una rica mezcla de tierra de jardín, hojas, estiércol podrido y arena.
La planta de baya de goji en maceta debe cultivarse al aire libre durante al menos el primer año después de la siembra, después de lo cual se puede trasladar a una terraza o balcón.
Para crecer con éxito, debe colocarse en un lugar soleado. La baya de Goji crece bien en sitios con sombra parcial ligera, pero luego produce frutos relativamente más pequeños.
No debes olvidar regar la planta regularmente y no dejar que se seque. Si es necesario, es bueno transferir el arbusto a una maceta adecuada para su tamaño.
Antes de iniciar la vegetación intensiva, definitivamente se debe realizar una poda para su correcta ramificación. Las ramas cortadas se arraigan fácilmente en un recipiente con agua o una mezcla ligera de tierra, lo que le permite disfrutar fácilmente de un jardín lleno de bayas de goji.
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