El ácido fólico o vitamina B9, también llamado folato o folacina, es una vitamina del complejo B conocida por su gran importancia en el embarazo y la prevención de defectos en el embarazo. Estos defectos incluyen una malformación de una estructura fetal llamada tubo neural.
La vitamina B9 es una vitamina soluble en agua que se extrajo por primera vez de las espinacas. La vitamina B9 se denominó entonces folacina del latín folacin, que se traduce como hoja. Las verduras de hoja verde con hojas grandes se consideran la mejor fuente de ácido fólico. La vitamina B9 es esencial para la formación de glóbulos rojos.
El ácido fólico es una de las vitaminas químicas más complejas, con una estructura de tres partes que impone exigencias especiales al metabolismo del cuerpo. Los tres componentes principales del ácido fólico son PABA, ácido glutámico y pteridina.
La mayoría de los alimentos no contienen folato en la forma exacta descrita anteriormente, y las enzimas intestinales cambian las formas químicas de los folatos para permitir su absorción. Incluso cuando el cuerpo funciona con plena eficiencia, solo se puede absorber alrededor del 50% de la ingesta de folato en la dieta.
Funciones del ácido fólico
- Apoya la formación de glóbulos rojos y la circulación sanguínea - una de las funciones clave del ácido fólico como vitamina es permitir el desarrollo completo de los glóbulos rojos.
- Apoyan la transferencia de oxígeno en el cuerpo. Con la falta de ácido fólico, los glóbulos rojos no se forman correctamente y continúan creciendo sin dividirse. Esta condición se llama anemia macrocítica;
- El ácido fólico también ayuda a mantener una circulación sanguínea saludable en el cuerpo al prevenir la acumulación de una sustancia llamada homocisteína. Al reducir los altos niveles de homocisteína, los folatos protegen contra el desarrollo de la osteoporosis;
- Producción de células - las células de vida muy corta (como las células de la piel, las células intestinales y las células que se encuentran en superficies o cavidades corporales visibles) dependen en gran medida del ácido fólico para su producción. Por esta razón, la deficiencia de folato genera problemas en este tipo de tejidos. En la cavidad oral, estos problemas están relacionados con la gingivitis, el paladar hendido y la enfermedad periodontal;
- En el caso de la piel, el problema más común de este tipo es la seborrea. La pérdida de pigmento de la piel (vitíligo) también puede estar asociada con la deficiencia de folato. Los cánceres de esófago y pulmones, de útero y cuello uterino, de los intestinos (especialmente del colon) también se asocian repetidamente con la deficiencia de folato;
- Ayuda al sistema nervioso - la prevención de defectos del tubo neural en los recién nacidos es solo una de las funciones del ácido fólico relacionadas con el sistema nervioso. La deficiencia de folato se asocia con una amplia gama de problemas del sistema nervioso, que incluyen fatiga mental general, demencia no senil, depresión, síndrome de piernas inquietas, problemas en manos y piernas, irritabilidad, distracción, confusión e insomnio.
Sobredosis de ácido fólico
Tomar dosis muy altas de folato, superiores a 1.000 - 2.000 microgramos, puede activar los mismos tipos de síntomas relacionados con el sistema nervioso que comúnmente se usa para prevenir.
El Instituto de Medicina de la Academia Nacional de Ciencias de EE. UU. ha establecido el límite máximo tolerable de ingesta de folato en 1000 microgramos para hombres y mujeres mayores de 19 años. Este límite superior solo debe aplicarse al "folato sintético": formas de folato obtenidas de suplementos y/o alimentos fortificados.
El ácido fólico que contienen los productos de origen animal (como el hígado de ternera) es relativamente estable durante la preparación de los alimentos, a diferencia de los folatos que contienen los productos de origen vegetal (como la col), que pueden perder hasta un 40 % de su contenido al cocinarlos. A su vez, los granos y harinas procesadas pueden perder hasta un 70% de su contenido de folato.
Los medicamentos que pueden interrumpir el suministro de folato del cuerpo incluyen: medicamentos contra el cáncer como el metotrexato; medicamentos para reducir el colesterol como la colestiramina; fármacos antiinflamatorios como sulfasalazina; también medicamentos como buformina, fenformina o metformina utilizados para tratar la diabetes; pastillas anticonceptivas.
Beneficios del ácido fólico
El ácido fólico puede jugar un papel importante en la prevención y/o tratamiento de las siguientes enfermedades - alcoholismo, anemia, aterosclerosis, displasia cervical, tumor cervical, paladar hendido y labios, enfermedad de Crohn, depresión, diarrea, gingivitis, enfermedad inflamatoria intestinal, insomnio, defecto del tubo neural, demencia no senil, tumores de ovario, síndrome de piernas inquietas, esquizofrenia, seborrea, tumores uterinos, etc.
Fuentes de ácido fólico
El ácido fólico generalmente se encuentra en su forma simple en los suplementos dietéticos. Excelentes fuentes de ácido fólico son la lechuga, las espinacas, los espárragos, los nabos, las hojas de mostaza, el hígado de res, el perejil, el brócoli, la coliflor, la remolacha y las lentejas.
Muy buenas fuentes de ácido fólico son las calabazas, los frijoles negros, las alubias, la papaya y las judías verdes.
Tabla ejemplar de productos y la vitamina B9 que contienen
Producto (100 g) Vitamina B9 (mg)
germen de trigo - 1.1
hígado - 0.32 - 0.38
queso - 0.30
carne de pollo - 0.15 - 0.20
corazón de toro - 0.11 - 0.16
ternera - 0.09 - 0.16
coliflor - 0.11 - 0.14
patatas - 0.08 - 0.14
Guisantes - 0.13
Melón - 0.13
Carne de cordero - 0.11
Zanahorias - 0.10
Pescado - 0.09
Huevos - 0.09
Lomo de cerdo - 0.05 - 0.08
Naranjas - 0.08
Cordero - 0.077
Tomates - 0.075
Harina de trigo - 0.067
Col - 0.065
Melocotones - 0.17
Cebollas - 0.013
Manzanas - 0.008
leche de vaca - 0.005
Deficiencia de ácido fólico
La deficiencia de vitamina B9 rara vez se observa, pero los hábitos nocivos como el alcohol, el tabaco, la cafeína, el procesamiento térmico de los productos y la luz solar directa pueden destruir o impedir la absorción de ácido fólico. El ácido fólico es la única sustancia en la que se duplican las necesidades de una mujer embarazada.
La deficiencia de vitamina B9 provoca trastornos en la división celular, que son más pronunciados en los tejidos en regeneración. La deficiencia de ácido fólico junto con la deficiencia de vitamina B12 provoca trastornos en la formación de glóbulos rojos en la médula espinal y anemia megaloblástica. Pueden ocurrir trastornos en las vainas de los nervios periféricos y cambios degenerativos en la médula espinal.
Para evitar la deficiencia de vitamina B9 en los primeros meses críticos del embarazo y para prevenir malformaciones fetales, las mujeres que planean quedarse embarazadas deben comenzar a tomar ácido fólico como suplemento desde los primeros intentos de concebir.
Como quedó claro de las líneas anteriores, el ácido fólico es un mineral extremadamente importante durante el embarazo. Ayuda en la construcción de la placenta, la expansión del útero y el desarrollo general adecuado del embrión. El ácido fólico también juega un papel importante en muchos otros procesos del organismo, por lo que no se debe descuidar su ingesta.
El mineral es extremadamente sensible y, por lo tanto, se destruye fácilmente por los efectos de la temperatura y la luz. Como resultado, es mucho más probable que el cuerpo sufra una deficiencia de ácido fólico en algún momento. En este caso, es necesario tomar un suplemento, lo que es especialmente imprescindible cuando se planifica un embarazo y en los primeros meses después de quedar embarazada.
Se cree que el ácido fólico debe tomarse al menos 3 meses antes de quedar embarazada y 2 después. El ácido fólico juega un papel clave en la formación del tubo neural fetal, a partir del cual se desarrollan la médula espinal y el cerebro del bebé. Gracias al ácido fólico, estos procesos se completan al día 28 de embarazo.
La deficiencia del mineral durante el embarazo conlleva un grave riesgo de defectos, entre los que se encuentra la espina bífida. La ingesta de ácido profiláctico reduce este riesgo hasta en un 80 %, por lo que no debe subestimarse.
Una dosis diaria de 400 mcg de ácido fólico por día suele ser suficiente.
