Tomar té ha sido un ritual durante siglos en el Oriente. Esta práctica comenzó en China, se extendió a Japón y los británicos introdujeron el consumo de té negro con leche y azúcar, que es efectivamente la base del té llamado masala.
Con el tiempo, en la India, se agregaron especias a la bebida para mejorar el sabor. La mayoría de las veces, añadían cardamomo, que realzaba el aroma y ayudaba a la absorción de la leche, y también neutralizaba el efecto nocivo de la cafeína, que se encuentra en el té negro.
El cardamomo no es la única especia en este té. El jengibre, el clavo y la pimienta negra también están presentes. Le dan ese sabor mágico al té, no por casualidad llamado masala, que se traduce como una mezcla de especias. Su combinación hoy depende del gusto y las preferencias personales.
Sin embargo, las principales especias del té masala son 4: cardamomo, jengibre, pimienta negra y canela. El cardamomo y el jengibre reducen la mucosidad, alivian los gases, calman el estómago y eliminan las toxinas. La pimienta negra rejuvenece los tejidos y la canela tiene un buen efecto sobre la circulación sanguínea y el corazón.
El Masala Chai es un agente antiinflamatorio con un buen efecto analgésico. Es bueno para los resfriados y la tos, fortalece la inmunidad y mejora la digestión. Los taninos del ingrediente principal, el té negro, regulan la presión arterial y dilatan los vasos sanguíneos. El clavo elimina el colesterol malo y previene la formación de placas. La bebida despierta y tonifica el cuerpo, pero no es para uso diario según Ayurveda porque es un estimulante demasiado fuerte.
Podemos hacer té masala cuando necesitemos un estímulo y tonificación o cuando estemos resfriados.
Masala Chai
Ingredientes:
- Un litro de agua
- 7-8 clavos de olor
- 10 granos de pimienta negra
- Canela en rama
- 10 vainas de cardamomo
- 4 rodajas de jengibre fresco
- 1/2 cucharada de té negro
- 150 mililitros de leche
- Miel al gusto
Calienta el agua en una cacerola y ponga los clavos. Déjelos durante 1 minuto. Luego agregue el cardamomo, la canela, la pimienta negra y el jengibre. Cocine durante aproximadamente media hora a fuego lento con la tapa cerrada. Cuando se retira del fuego, se añade el té negro y se deja reposar unos minutos. Luego se le agrega la leche, se vuelve a calentar hasta el punto de ebullición. Se cuela y cuando se enfría se le añade miel, y se puede endulzar con jarabe de arce o azúcar moreno.
La leche, según Ayurveda, le da al cuerpo ojas - inmunidad, felicidad y satisfacción, que aseguran su salud de la manera más sutil. Si el cuerpo no puede tolerar la leche de vaca, se puede reemplazar con leche de coco o leche de arroz.