El queso es rico en calcio, fósforo, zinc y oligoelementos que ayudan a restaurar la acidez en la boca. Las cualidades recogidas en él ayudan a formar tejido óseo. En general, el calcio es un elemento difícil de digerir. Sin embargo, en el queso se encuentra en forma de lactato cálcico, por lo que se absorbe fácilmente.
Los mayores contenidos de las cualidades favorables del queso se encuentran en el queso fresco, pues en cualquier otra versión de queso procesado de alguna manera, un determinado elemento reduce sus propiedades o desaparece por completo. El queso fresco también es beneficioso para las personas con diabetes, ya que es rico en proteínas y bajo en carbohidratos.
El queso fresco también se llama queso sin madurar. Se elabora a partir de leche fermentada con enzimas y luego se escurre el suero. La cuajada que queda se convierte en queso. Hay que tener en cuenta que los quesos frescos tienen mayor contenido de humedad, por lo que se echan a perder rápidamente.
Los quesos frescos son similares en sabor y textura. Se pueden encontrar no sólo en tiendas especializadas en productos lácteos, sino también en las cadenas alimentarias más habituales.
Cuando una persona tiene intolerancia a la leche de vaca, esto no es un problema. Puede comer queso elaborado con leche de otros animales: cabra, oveja.
El queso de cabra tiene un sabor más fuerte que el de vaca y se considera graso. El de oveja, en cambio, tiene un gusto específico, pero es precisamente por ello que es muy valorado.
Las enzimas y bacterias que contiene el queso fresco son viables sólo cuando se utilizan en estado fresco. Usar una temperatura de procesamiento más alta los mata.
El consumo de quesos frescos nutre y fortalece el organismo.
El Queso fresco:
- Reduce el colesterol y previene la pérdida de tejido óseo;
- Aporta bacterias beneficiosas y ácidos lácticos al tracto digestivo, que protegen contra enfermedades y ayudan a digerir fácilmente los alimentos;
- Aumenta su contenido en vitamina B y C durante la fermentación;
- Es mejor absorbido por las personas intolerantes a la lactosa porque la mayor parte se convierte en ácido láctico;
- Aumenta las enzimas que contribuyen a la digestión.
