¿Es posible que un queso sepa a nuez de macadamia con toques de caramelo, y su aroma recuerde al cordero asado? Y al mismo tiempo, debe ser un verdadero producto lácteo.
La descripción coincide completamente con el queso manchego español, que se encuentra entre los alimentos tradicionales más populares en la tierra natal de Don Quijote. Después de todo, se produce en la región natal del héroe de Cervantes: La Mancha, provincia de Albacete. El queso madura entre 60 días y 2 años y se elabora únicamente con leche de ovejas que pastan en esta región. El propio queso manchego lleva su nombre.
Según cuentan los lugareños, la tradición de hacer queso manchego se remonta a la Edad del Bronce, cuando los habitantes de La Mancha se especializaron en la elaboración de queso de oveja.
¿A que sabe el Queso Manchego?
Aunque firme, la consistencia de Manchego es bastante mantecosa. Su color puede variar desde el marfil, pasando por el amarillo, hasta el marrón-beige. La característica de la estructura del queso son los pequeños agujeros que se forman durante su maduración.
El sabor se describe como no demasiado fuerte, con un ligero picante y un postgusto largo típico de la leche de oveja.
Tipos de queso manchego
El sabor de este producto tradicional español depende de su edad y del tiempo que se haya dejado madurar el queso.
Tierno/Fresco - esta es su forma más joven, y muchos evitan llamarlo manchego, ya que el queso tiene solo 2 semanas. Tiene un sabor fuerte pero suave y llega al mercado en cantidades muy limitadas ya que los agricultores prefieren esperar a que el producto madure.
Semicurado - en esta etapa de maduración, el queso ya está alrededor de la edad mínima estándar. Esta categoría incluye Manchego de edad entre 3 semanas y 3-4 meses. Su consistencia es todavía blanda, y el sabor es ligeramente afrutado, con notas de hierba y ligeramente ácido.
Currado - este es el manchego que se madura entre 3 y 6 meses. El queso ya ha comenzado a adquirir un ligero sabor a nuez con toques de caramelo. Sin embargo, todavía tiene una alta acidez.
Viejo - en esta fase final, el queso ya ha madurado y han pasado entre 1 y 2 años desde su elaboración. Tiene una textura quebradiza y es similar en color al caramelo claro. El sabor es salado, dulce y ligeramente picante.
Características del queso Manchego
En la receta tradicional, el queso se elabora con leche de oveja sin pasteurizar. Hoy, sin embargo, también se utiliza pasteurizada. Los únicos otros aditivos permitidos son el cuajo natural o la enzima coagulante y la sal.
Luego, el producto se presiona en moldes cilíndricos especiales que dejan la marca distintiva en zig-zag en relieve en la superficie de las ruedas. Esto se hace para parecerse a las huellas de las cestas de esparto tejidas en las que los españoles antiguamente preparaban el queso. Los moldes no deben tener más de 12 cm de alto y su diámetro no debe exceder los 22 cm.
Al final, las ruedas se marcan con un sello en el que se representa un tallo de trigo. Esto se hace como prueba de que el queso es un producto original y no una copia del manchego.
Únicamente los quesos elaborados en La Mancha que tengan denominación de origen protegida e indicación geográfica protegida según la normativa comunitaria tienen derecho a llevar esta denominación.
Después de "sellarse", los quesos se sumergen en agua salada durante 1 o 2 días. A medida que maduran, se les forma una costra natural. La normativa permite lavarla, recubrirla con parafina o aceite de oliva, pero no retirarla del queso.
¿Cómo servir el queso Manchego?
Su sabor se siente mejor cuando el queso se deja a temperatura ambiente. El queso manchego se sirve en lonchas finas y va bien con salchichas, por supuesto mejor con jamón y aceitunas marinadas, una tapa típica española.
Va mejor con vinos tintos - Cabernet Sauvignon, Merlot, Syrah y Tempranillo español.
100 gramos de queso Manchego contienen alrededor de 250 calorías, 20 gramos de grasa y 20 gramos de proteína..
¿Cómo cortar el queso Manchego?
Queso manchego en trozos
Cortar el manchego en forma horizontal y luego en forma vertical. Trate de mantener el corte lo más parejo posible. Ahora córtalo en trozos pequeños. Aunque no es necesario que los trozos tengan exactamente el mismo tamaño, a menos que la receta requiera que los ingredientes se corten en trozos grandes, haga los trozos un poco más grandes.
Queso manchego rallado
Para obtener manchego rallado, puede usar un rallador de queso y frotar suavemente todo el bloque hacia arriba y hacia abajo. Si la receta requiere queso rallado fino, utilice el rallador de queso rallado fino. Asimismo, si desea queso rallado grueso, puede utilizar el rallador de verduras que tiene agujeros grandes. El queso manchego rallado se usa en sándwiches fríos, hamburguesas jugosas o como guarnición.
Cubos de queso manchego
Coloque el queso en una tabla de cortar. Con un cuchillo, primero corta el manchego en forma horizontal y luego en forma vertical. Trate de cortar lo más uniformemente posible. Ahora córtalo en trozos cuadrados de aproximadamente un centímetro de diámetro, aunque los cubos no tienen que ser exactamente del mismo tamaño. Trate de mantenerlo igual. Puede aumentar o disminuir el tamaño de los cubos a pequeños, medianos o grandes según la receta manchega.
Tiras de queso manchego
Coloque el manchego en una tabla de cortar
Con un cuchillo, córtalo de arriba a abajo en dirección vertical. Ahora deja caer cada rebanada sobre la tabla y córtala con cuidado en tiras.
Queso manchego desmenuzado
Para machacar el manchego, corta el bloque por la mitad. Póngalo en un procesador de alimentos y gire la cuchilla. El queso rallado se mantendrá fácilmente durante al menos 6 meses en el congelador. Cuando quieras descongelar el queso rallado, sácalo del paquete y colócalo entre papel de cocina. Uno arriba y otro abajo. Esto absorberá la humedad. Una vez descongelado, es mejor usarlo en recetas donde se derrita, como pizza casera o gratinado de queso. El queso es mejor congelarlo triturado.
Queso manchego en lonchas
Coloque el queso Manchego en la tabla de cortar. Córtalo verticalmente de arriba a abajo con un cuchillo. Si la receta requiere que los ingredientes se "corten en rebanadas gruesas", haga las piezas un poco más grandes. Del mismo modo, si desea queso manchego "en lonchas finas", córtelo en trozos aún más finos.
Selección de queso Manchego
Manchego tiene un sabor salado y deja un regusto a leche de oveja notable. Compruebe si hay un color de blanco a marfil. Solo las tiendas selectas de comida gourmet venden este queso. El producto es semiduro al tacto y está disponible en tortas de 2 kg con diferentes estados de maduración.
Se puede cubrir con pan untado con ajo y una rodaja de tomate.
También se puede acompañar con galletas, así como con cualquier plato vegetariano, cordero asado o recetas de salmón.
Puede agregarlo a la pasta, reemplazando su elección habitual de queso. Acompaña bien a la cerveza o al vino de Rioja. Desmenuzado, se puede usar en quesadillas o para nachos como queso de cobertura.
También se puede utilizar en sopas con queso.
Puedes preparar algo como muffins salados con queso Manchego.
Para hacerlo, mezcle los huevos, la leche, la mantequilla, la harina, la sal y la pimienta. Agregue el queso, el cilantro y las aceitunas y llene con cuidado los moldes para muffins preparados casi hasta arriba. Hornee hasta que estén doradas.
También se puede utilizar combinado con pimiento rojo, ajo, tomates secos. El queso manchego y las papas también van bien como combinación en cualquier receta.
Almacenamiento de queso Manchego
Puede guardar el queso manchego en el refrigerador o congelador durante 6 meses si no lo abre. Después de abrir el paquete, intente usarlo lo antes posible, de lo contrario, puede haber formación de moho debido al contenido de humedad.
Beneficios del queso Manchego
El queso manchego tiene un alto contenido de grasa y, por lo tanto, es una buena fuente de ácidos grasos y aumenta la ingesta de calorías. Contiene vitaminas liposolubles como la vitamina A, D, E y K. Son muy necesarias para diversas funciones del organismo. También es una rica fuente de calcio, que es importante para el crecimiento y mantenimiento de huesos y dientes. Dado que se deriva de la leche, es una buena fuente de proteína necesaria para el crecimiento y mantenimiento de los tejidos y la construcción del cuerpo. Prueba recetas con queso manchego.
