Evitar comer en exceso
Entre los hábitos alimenticios más dañinos está el picoteo constante, lo que lleva al hecho de que empiezas a comer en exceso sin darte cuenta. No tiene nada de malo comer un poco entre comidas para mantener los niveles de azúcar en la sangre bajo control.
Pero si en lugar de comer una fruta o una verdura o algún alimento saludable, te limitas a engullir la comida que te pasa cada media hora, muy pronto perderás tu ritmo normal. Los alimentos como las patatas fritas y los dulces (pasteles de nata, pasteles de chocolate, pasteles almibarados) deben consumirse con moderación porque pueden ser muy perjudiciales.
Para mantener su energía, coma un sándwich saludable, galletas integrales con queso, un puñado de frutas deshidratadas, un sándwich de aguacate, barritas de proteína, frutos secos, o una zanahoria.
Muy a menudo, la gente come algo mientras ve la televisión. Si comes frente al televisor, consumirás un cincuenta por ciento más de comida que en la mesa.
Así que come antes de sentarte frente al televisor, o si necesitas picar algo mientras ves una película, abastécete de una gran cantidad de vegetales picados.
Las mujeres muy a menudo buscan dulces y pastas para arreglar su mal humor. Esto les calma por un corto tiempo, pero afecta tanto el estado de ánimo en las horas siguientes como la cintura.
Antes de llegar al pastel de crema, piensa en qué es exactamente lo que arruinó tu estado de ánimo. Trate de solucionar el problema llamando a un amigo o yendo al cine.
Muchas personas comen bien durante la semana, pero los fines de semana se pasan de la ralla. Entonces arruinan todo el efecto de una dieta saludable de cinco días permitiéndose un trozo de pizza, pollo frito, pollo empanado, etc.
Antes de salir con los amigos el fin de semana, come bien en casa para no tener la tentación de comer alimentos nocivos. Y no te limites tanto durante la semana para que el fin de semana no se convierta en tiempo de abarrotar.
Comer alimentos envasados - sopas concentradas, conservas y dulces envasados (croissants, bollos, pequeñas galletas, éclairs) puede convertirse en una fuente de obesidad repentina. Opte por las verduras frescas y las sopas elaborados con ingredientes naturales en lugar de los que vienen en latas y paquetes. De postre, come fruta o yogur.
Muchas personas comen sobre la marcha - mientras conducen o caminan. Así que constantemente sienten hambre y comen alimentos no muy saludables. Si realmente no tienes tiempo para comer en la mesa durante al menos quince minutos durante el día, come frutos secos, frutas deshidratadas, frutas frescas o productos lácteos.
Un muy mal hábito alimenticio es comer rápido. Al tragar trozos enteros de pizza de carne sin masticar, estás dañando su estómago. Cuando comes muy rápido, el cerebro no tiene tiempo para poder rastrear la comida y tarda más de veinte minutos en saber que has comido.
Trate de comer más despacio, de esta manera protegerá el estómago y comerá mucho menos. Los comedores de dulces deben saber que algunos dulces pueden darles un impulso de energía, pero luego hay una fuerte caída. Las alternativas a las tartas y pasteles son las frutas deshidratadas y los copos de maíz dulces.
¿Cuáles son los hábitos alimenticios más dañinos?
Comer una vez al día
Es un trastorno alimentario. La tasa metabólica se ralentiza y los kilos se pierden mucho más fácilmente. La persona que come una vez al día ni siquiera siente esto, porque el cuerpo se adapta, y es ahí donde aparecen esos desórdenes metabólicos y la acumulación de kilos de más.
Estos cambios metabólicos cambian el cuerpo y los kilos de más aparecen año tras año. Cuando la gente va al nutricionista dice que no puede comer por la mañana, pero quiere una dieta para adelgazar, para poder comer por la noche y lo que le gusta, pero en ningún caso por la mañana. Las personas no son conscientes de que están en un sistema completamente defectuoso que necesita ser cambiado.
Saltar el desayuno
Muchas personas suelen saltarse las comidas. Entonces comen más en exceso y su actividad se reduce. Este es un muy mal hábito alimenticio. Para estar sano y delgado, come por la mañana. Así tendrás tiempo para quemar las calorías y te sentirás con energía.
Quienes se saltan el desayuno no se dan cuenta que tienen menor productividad en el trabajo o en la escuela, pierden la concentración. Además, las personas que se saltan el desayuno sufren de mareos, irritabilidad, cambios de humor.
Cena tardía
La mayoría de las personas ocupadas modernas no cenan en una hora normal, sino cuando tienen la oportunidad. Muchas veces, la noche es el único momento en que pueden comer en paz. Desafortunadamente, esto sucede tarde. La gente se calma cuando llega a casa por la noche con su familia y aparece la rica cena: filetes de pollo, albóndigas en salsa, kebabs con guarniciones, pimientos rellenos con carne picada, moussaka - la mesa está llena de tantas tentaciones, ¡quién puede resistirlas!
A pesar de que han consumido mucha comida y están cansadas, las personas ya no pueden dejar de comer, porque de esta manera se liberan de todo el estrés del día. La comida tiene la función de modular el estado emocional para aliviar todos los dolores del día. El sobrepeso y una serie de problemas surgen sin darnos cuenta de que tenemos hábitos alimentarios nocivos. Dependiendo del biorritmo de la persona, 4 horas antes de acostarse es ideal para la última comida; por supuesto, comida no muy pesada y difícil de digerir para un sueño reparador. El sueño es muy importante cuando se trata de controlar el peso.
Comer pan
El pan es una parte esencial de la mesa búlgara y no es ningún secreto que a menudo hacemos hincapié en la masa. Desafortunadamente, el pan disponible en el mercado también contiene ingredientes dañinos. La harina blanca no es la más útil. Por lo tanto, comer demasiado pan blanco puede ser un mal hábito alimenticio que daña el nivel de azúcar en la sangre y el peso. Trate de comer más pan sin gluten, pan multicereales, pan con semillas, pan con nueces, pan de centeno.
Comer bollos y pasteles
Comer bocadillos y postres es habitual en los costumbres de los españoles. Rosquillas de mermelada, magdalenas, cocas, bollos de mermelada y galletas, roscones son parte de la merienda matutina de muchos. Todos estos snacks contienen harina blanca, levadura, azúcar y grasas nocivas. Cuando se consumen todos los días, es un mal hábito alimenticio.
Zumos y refrescos
Los zumos que no son naturales son altos en calorías y altos en azúcar, lo que promueve la obesidad. Deben consumirse con moderación (a ser posible en una fiesta), y no llenar las estanterías de casa con ellas. El uso frecuente de zumos provoca aumento de peso y caries.
Merienda
Alrededor de las 3-4 p. m., realmente ansiamos algo dulce para la merienda. Por lo general, después de una comida, el nivel de energía del cuerpo cae drásticamente. Así que imagina que la única manera de animarte es comerte una barra entera de chocolate. Pero esto es un mal hábito alimenticio. ¿Cómo evitarlo? La lucha contra los antojos obsesivos de dulces a menudo termina en derrota. Es mejor comer solo dos o tres piezas de chocolate. Si aprendes a controlarte, será genial. Para evitar los antojos, respira aire fresco, habla con los compañeros, sal a caminar o toma un café.
Combinación incorrecta de alimentos
A todo el mundo le encantan los platos ricos y una explosión de sabores, pero la combinación incorrecta de alimentos te puede traer pesadez en el estómago, náuseas, vómitos y otras dolencias. Por ejemplo, no se recomienda comer huevos con pescado. Tampoco es deseable mezclar demasiados tipos diferentes de alimentos en un plato.
Fumar
Fumar es un mal hábito, pero cuando fumas mientras comes, dañas aún más tu salud. Trate de abstenerse de fumar durante las comidas para no molestar a los demás. A nadie le gusta comer en un ambiente lleno de humo.
Otro mal hábito durante las comidas es beber mucha agua o líquidos, lo que diluye los jugos gástricos e interfiere con el procesamiento de los alimentos.
Mucho hablar y moverse mientras se come tampoco es muy propicio para la digestión.
Comer frente a la computadora es otro hábito muy malo de la gente moderna, que lamentablemente se está observando cada vez más.
