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Alimentos permitidos para cálculos biliares

Yordanka Kovacheva
Traducido por
Yordanka Kovacheva
Cálculos biliares

Para los problemas de bilis, la dieta es una parte importante del tratamiento. Las operaciones de extirpación de la vesícula biliar son cada vez más habituales y los motivos radican en el sedentarismo que llevamos, los alimentos grasos que ingerimos y el consumo de cada vez menos fruta.

La dieta para la enfermedad de cálculos biliares es imprescindible, no importa si tienes un problema o si ya se ha solucionado. Algunos grupos de alimentos simplemente debes olvidarlos por un tiempo para no causarte más dolores y problemas de salud.

El cólico biliar es realmente doloroso: una sensación desagradable se define como un fuerte espasmo en el lado derecho, debajo de las costillas. Por lo general, este dolor se extiende al cuello o al hombro y lamentablemente suele ir acompañado de vómitos y fiebre alta.

En la mayoría de los casos, una crisis de este tipo puede deberse a una alimentación inadecuada. Las carnes grasas están absolutamente prohibidas en caso de bilis enferma, se deben evitar los huevos, el repollo, las espinacas y el café. El régimen es bastante severo, especialmente para los glotones, pero si quieres aliviar tu condición, es mejor seguirlo.

No se deben consumir alimentos fritos, ciertos tipos de especias – rábano picante, perejil, mostaza y apio; Entre las verduras desfavorables para su estado se encuentran las setas, las judías y las lentejas, los guisantes, las berenjenas, las cebollas, los ajos, los puerros, las judías verdes y, por último, pero no menos importante, todos los tipos de pasta y panes hechos con levadura.

Muslos de pollo

Se permiten carnes magras como pollo, el pescado, ocasionalmente clara de huevo, productos lácteos (queso sin sal, requesón, leche), sopas cremosas, cualquier fruta, pan integral, pasta, galletas saladas, tomates, ensaladas, pepinos, patatas, remolacha. Beba más líquidos: diferentes zumos de frutas, refrescos, mucha agua, infusiones de hierbas.

No estás condenado a seguir esta dieta de por vida. Es bueno restringirse durante al menos 3 a 5 meses y luego pasar gradual y lentamente a la alimentación general, abandonando finalmente las espinacas, las legumbres, bebidas carbonatadas, el café y el alcohol.

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