La rúcula es una verdura de hoja verde que se está convirtiendo lenta y seguramente en un símbolo del gusto refinado y selecto. La rúcula fresca con un sabor a nuez y una nota picante parecida a la mostaza, es un ingrediente ideal en todo tipo de ensaladas verdes, pastas, pizzas y otros platos de la cocina italiana.
Además de su rico sabor, la rúcula también sorprende con innumerables beneficios para la salud. Pariente lejano de la col, la coliflor y los nabos, tiene una baja cantidad de calorías, que se compensa con una gran cantidad de nutrientes.
Sus propiedades curativas se deben principalmente a las grandes cantidades de vitamina C. Es un potente antioxidante que aumenta las defensas del organismo. También ayuda a eliminar toxinas.
El cuerpo procesa el betacaroteno de la rúcula y lo convierte en la vitamina A anticancerígena. El sulforafano de la verdura también tiene propiedades anticancerígenas. Esto lo convierte en el alimento número uno en la lucha contra todas las enfermedades. Además, la dosis sólida de vitamina A protege contra los calientes rayos del sol.
La rúcula también contiene vitaminas B2, B5, B6, además de mucha fibra. La deficiencia de vitamina B provoca fatiga y pereza inexplicables. El consumo regular de rúcula regula el metabolismo y ayuda al organismo a afrontar la fatiga.
La ensalada de rúcula se recomienda para personas propensas a sufrir anemia o que ya la padecen. Aporta una valiosa dosis de hierro al organismo.
Los compuestos de la rúcula la convierten en un alimento maravilloso para cualquier dieta. 100 g de esta verdura de hoja contienen sólo 25 calorías. El sabor ardiente también favorece la liberación de toxinas.
Otro beneficio interesante de la rúcula es para las mujeres embarazadas. Contiene el ácido fólico que tanto necesitan. 100 g de ensalada aportan la mitad de la ración diaria de la misma.
La rúcula se debe consumir en su estado fresco, picada en trozos grandes. Se puede condimentar con aceite de oliva, vinagre balsámico y parmesano. Si el sabor es demasiado picante para tus sentidos, lo mejor es utilizarla como condimento para ensalada de lechuga o espinacas. La rúcula combina mejor con productos mediterráneos.
