Cocinar con grasa de pato es un éxito en muchos países como EE. UU., Reino Unido y Suiza. Incluso existen cadenas de restaurantes consolidadas que ofrecen una carta bastante variada, incluyendo platos elaborados con ella.
Se hizo una comparación entre los nutrientes en la carne de pato y otros tipos de carne y se encontró que era mucho más beneficiosa para la salud. Contiene cuatro veces más hierro que otras carnes y de 3 a 10 veces más vitamina A.
Ayuda a proteger los ojos, la nariz y la cavidad oral, por lo que las personas que usan una computadora con frecuencia o están expuestas a los gases de escape de los vehículos a diario, es imprescindible tomar vitamina A. La carne de pato también contiene grandes cantidades de vitamina B1 y B2.
La grasa de pato contiene niveles más altos de ácidos grasos insaturados que otras grasas animales. Actúan en el cuerpo como un antioxidante natural y reducen el nivel de colesterol. La ingesta inadecuada de ácidos grasos insaturados puede provocar enfermedades del corazón, el cerebro, las arterias y los vasos sanguíneos, así como retraso mental en los niños y demencia en los adultos.
Además, hay una gran ventaja en la producción de carne de pato y la clave es la grasa de pato. El punto de fusión de la grasa de pato es de solo 14 grados centígrados, mucho más bajo que la temperatura del cuerpo humano, mientras que para el cerdo y el pollo es de 45.38 y 37 grados respectivamente.
Debido a este hecho, el cuerpo humano lo descompone mucho más fácilmente, se procesa rápidamente y se excreta rápidamente, lo que reduce el riesgo de obesidad. Esto también afecta el sabor y las cualidades, porque el punto de fusión más bajo hace que la carne de pato sea sabrosa incluso cuando se sirve fría.
Muchos no son conscientes de los beneficios de la grasa de pato para nuestra salud. Contiene un 35.7 por ciento de ácidos grasos saturados y un 50.5 por ciento de grasas monoinsaturadas (altas en ácido linoleico) y un 13.7 por ciento de grasas poliinsaturadas (ácidos grasos omega-6 y omega-3). Esta composición la acerca más al aceite de oliva que a otras grasas animales.
